¿Cómo jugar 21?

Es uno de los juegos más populares de cartas y millones de personas lo juegan en casinos y en sus casas. ¿Te sumas a esta fiebre?

21, también conocido como Blackjack, es uno de los clásicos juegos de naipes más populares de todo el mundo. Incluso, quizás, el más popular junto al póker. Jugar 21 en casinos, físicos o virtuales, entre amigos o familia, en la casa o en algún tren o avión durante un viaje, puede ser algo muy divertido.

Eso sí, para nadie es un secreto que en 10bet casino online la emoción a la hora de jugar 21 es mucho mayor. ¿Por qué? Por la gran variedad de opciones, y el grado de adrenalina al que se puede llegar es muy alto, especialmente cuando hay jugadas – y apuestas- muy interesantes e inesperadas de por medio. Para que estés preparado para ese momento, aquí te vamos a explicar cómo jugar 21.

¿Qué se necesita para jugar 21?

Lo primero que debemos entender es que para jugar 21 necesitamos de un crupier, que es la persona que se encargará de repartir las cartas y al menos un jugador. ¿Sólo uno? Sí, pues este juego es un enfrentamiento directo entre el jugador y el crupier. Además, hay que tener, al menos, un mazo de 52 cartas de la baraja francesa.

Claro, el número de mazos va en aumento según el número de jugadores, por lo que en algunos casos se ha llegado a jugar hasta con ocho mazos de 52 naipes cada uno. La idea, también, es que cada jugador tenga un espacio frente al crupier, y que en la mesa se cuente con el espacio idóneo para recibir cartas y realizar cualquiera de las jugadas necesarias. Cabe destacar que la capacidad usual de jugadores por mesa es de entre cuatro y siete jugadores.

Si lo comparamos por ejemplo con deportes que son parte de las apuestas, en el fútbol, que es supervisado por la FIFA, juegan 11 como titulares y pueden haber entre 7 y 12 suplentes. Pero volvamos al 21 o Blackjack, que despierta pasiones en el casino.

Reglas básicas para jugar 21

Antes de empezar con las reglas básicas para responder cómo jugar 21, lo mejor es entender el objetivo clave: quedarse lo más cerca posible al 21 -o llegar a esta cifra- y tener una mano más alta que el crupier. Justamente esta es una de las claves de la popularidad del juego: la simpleza. Si sumas más de 21 o el croupier tiene mejor mano que tú, pierdes. Si el croupier suma más de 21 o tu tienes mejor mano que él, ganas. Facilísimo.

Ahora que ya sabes el objetivo, vamos con las reglas básicas. Lo primero es encontrar la mesa con el monto de ingreso acorde a tu presupuesto. Luego, te unirás a la mesa y cuando todos los jugadores estén listos para iniciar la partida, el crupier repartirá dos cartas a cada uno: ambas boca arriba. Él, por su parte, se reparte una carta boca arriba y la otra boca abajo. Y aquí comienza lo bueno.

Lo primero que debes hacer es analizar tus cartas para poder decidir si pides una carta adicional o te plantas. Un jugador puede pedir cuantas cartas desee, siempre teniendo en claro que el objetivo es no pasar del 21. El valor de cada carta es el número de ésta, a excepción de la J, Q y K (valen 10 cada una), y el As que puede ser considerado como uno u once.

En caso hayas pedido otra carta, el valor se irá sumando hasta que decidas plantarte. En ese momento, el crupier deberá develar la carta boca abajo que tenía y jugará contra ti. Si el valor de la mano del crupier es de 16 o menos, estará obligado a pedir una carta. Una vez que él se plante (o tenga más de 21), se evalúan ambas manos para ver quién ganó la partida.

Consejos para jugar 21

Justamente lo último mencionado líneas arriba es algo que se debe aprovechar cuando se desea jugar 21. Si sabes que el crupier está obligado a pedir una carta adicional si tiene 16 o menos, lo mejor es plantarse cuando consigas una suma mayor a dicho 16. Recuerda que las victorias normales pagan la cantidad apostada, mientras que una victoria por blackjack (21 puntos exactos) paga 3:2.

Una vez que conozcas más del juego, podrás hacer uso de opciones como “separar” o “doblar”. La primera de ellas es la más popular, pues si tienes dos cartas del mismo valor puedes abrir dos opciones de mano diferente, teniendo el doble de oportunidad – y de riesgo, también-.

Si tienes dos cartas de figura podrás duplicar la chance de recibir un AS y lograr un 21, aunque los expertos recomiendan el 8 como la mejor carta para separar jugadas. ¿Por qué? Porque sacando un AS, dos o tres, o alguna figura, podrás tentar más de 18 sin problema. Doblar, por su parte, es tomar la decisión de aumentar la apuesta a mitad de partida, pero con la condición de recibir únicamente una carta adicional y plantarse.

Si te preguntabas cómo jugar 21, te has podido dar cuenta que es bastante sencillo. Como con la mayoría de las cosas en la vida, requiere más práctica que otra cosa. Además, es un juego que lo puedes llevar contigo a todos lados y es facilísimo de enseñar, por lo que puedes aprovechar el tiempo jugando entre amigos, o subirle la emoción y añadiendo dinero a las apuestas. Ya sea en un casino físico o virtual, las opciones abundan. Y la diversión está asegurada.