Tras más de un siglo de existencia en España, el gobierno eliminó la obligación de mantener las cabinas telefónicas como servicio público. Así lo dejó ver el proyecto de Ley General de Telecomunicaciones (LTG) aprobado por el Consejo de ministros. Aunque desde hace años ya habían quedado obsoletos, su lógica desincorporación había sido aplazado vez tras vez por razones sentimentales más que económicas.
En el territorio nacional aún existen alrededor de 15.000 cabinas. La anterior ley estipulaba que debía haber al menos un teléfono público de pago por cada 3.000 habitantes en cada localidad. Y una cabina en cada uno de los municipios de menos de 1.000 habitantes. Pero actualmente ya hay más de 5.000 municipios que no tienen ninguna cabina.
¿Por qué eliminaron las cabinas telefónicas?
Con la llegada de los teléfonos móviles en la década de los 90, las cabinas telefónicas iban quedando en el olvido. Víctimas del abandono y del vandalismo, a efectos prácticos se convirtieron en objetos de museo. Menos del 20% de la población ha usado alguna vez estos aparatos. En cuanto entre en vigor la nueva ley, serán eliminadas del servicio universal. De esta forma se prevé que dejarán de existir puesto que ninguna compañía va a hacerse cargo de ellas.
Hasta el momento el gobierno había obligado a Telefónica a costear el mantenimiento y servicio de las cabinas telefónicas, aunque le compensaban parcialmente ese coste. Según datos de Telefónica la media de llamadas por cabinas es de 1,15 al día, que iban dirigidas a unos pocos terminales, por lo que la gran mayoría de las cabinas siempre están inactivas.
Ley General de Telecomunicaciones (LGT) incorpora la banda ancha como parte del servicio universal. Entre otras cosas el servicio contendrá una serie de funciones, como usar motores de búsqueda o buscar empleo, así mismo deberán ser ofrecidas por todos los operadores. Pero aún deben desarrollarse las distintas normativas que regulan los aspectos técnicos de este servicio.
Más beneficios para los usuarios
La nueva ley también aporta más beneficios a los usuarios. Por primera vez serán regulados los servicios de comunicación interpersonales de mensajería o los no basados en números. Además, se refuerza la transparencia de los contratos la cual se limitará a 24 meses de duración. Se amplían los derechos en el ámbito de la portabilidad móvil y se regulan los paquetes de servicios. Sin lugar a duda con el adiós a las cabinas telefónicas han llegado ventajas para los usuarios.
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